¡Bienvenidos una vez más al que será el segundo post de mi blog personal!
Estrenamos la sección que denominaré personal thoughts, una sección que utilizaré para reflexionar, por lo general sobre aspectos relacionados con la economía y las finanzas, aunque no me ataré y daré rienda suelta a la imaginación… ¡Comencemos!
En el día de hoy os traigo una historia muy peculiar, que cuando la escuche por primera vez, concretamente en el podcast de ValueInvestingFM (podcast que recomiendo), hizo que tuviera que navegar un largo rato por internet informándome sobre este fascinante y a la vez terrible hecho histórico que tanto llamó mi atención.
Hoy os vengo a hablar del Millefiori, un cristal de preciado valor que hizo antaño la función de dinero en África Occidental desde el siglo XVI hasta el siglo XX.
Según he podido leer en varios blogs y artículos de internet (adjunto a pie de página algunos), se trata de un objeto conocido y anhelado por su historia en el campo de la Numismática: “El estudio y coleccionismo de monedas, medallas y papel moneda”.
Este tipo de cristal, en este caso cilíndrico (aunque también los había de otras formas), era muy preciado en África occidental, y dado que la producción de cristal era escasa, se trataba de un bien de mucho valor. Este objeto hacía las veces de dinero, ya que satisfacía las principales necesidades para el intercambio, que no son otras más que la liquidez, es decir, fácil y rápida venta, y la escasez, lo cual contribuye a la mejor preservación de valor.
El origen etimológico de la palabra Millefiori como no podía ser de otra forma es italiano, siendo su traducción literal “mil flores”.
Cuando los europeos desembarcaron en África, pronto se dieron cuenta del valor que los africanos daban a esos pequeños objetos.
Concretamente en lo que sería la actual Ghana y Mauritania, estos objetos se hicieron muy preciados y llegaron a funcionar como objeto de intercambio.
Garbe Mohammed, comerciante en la actualidad de estos objetos (hoy poco más que objetos de coleccionismo) e hijo de una familia históricamente dedicada al comercio de estos preciados cristales comentaba lo siguiente, en una entrevista a la que os adjunto el enlace al final del post:
“Estas cuentas se utilizaron para el comercio de trueque en los viejos tiempos. Algunas de estas cuentas fueron incluso intercambiadas por un esclavo”
Como no podía ser de otro modo, pronto los colonos se dieron cuenta del tremendo valor que el pueblo africano atribuía a estas cuentas (como se referían a estos objetos ya que pasaron a ser unidad de cuenta) por la ya mencionada escasez, y no dudaron en usar esto a su favor.
Con Holanda como líder, los países europeos comenzaron a comprar esclavos a cambio de cuentas. El ingenio de los colonos por supuesto, no terminó ahí, estos eslavos eran trasladados a Europa, donde serían explotados para producir nuevamente esos preciados objetos.
La falsa escasez, es decir, la percepción de escasez de los nativos (pero no real) provocó e incremento la liquidez de dicho objeto, e hizo pensar que se trataría de un buen objeto para la conservación de valor.
Como es lógico, cuando la producción de un activo esta centralizada y existen incentivos tan grandes para aumentar la base de dicho activo, inevitablemente, termina sucediendo, o al menos eso creo yo.
“Power tends to corrupt, and absolute power corrupts absolutely”- Lord Acton
https://www.worldremit.com/es/stories/story/2016/07/26/beads-ghana
https://angata.net/cuentas-de-vidrio-de-ghana/
http://curiosidadesnumismaticas.blogspot.com/2012/11/millefiori-dinero-africano.html